Contar con un buen diseño web es fundamental para el éxito de cualquier negocio. En cambio, tener un diseño web deficiente y con errores de UX (experiencia de usuario) afecta negativamente a su SEO (posicionamiento en buscadores).

Por eso es primordial que todo negocio revise el diseño de su página web de forma regular, teniendo además en cuenta los factores SEO esenciales.

7 errores de diseño web que pueden destruir tu SEO

En este post voy a hablarte de 7 errores de diseño web que pueden destruir tu SEO y que nunca deberías cometer si quieres que tu sitio web le guste a Google y a los usuarios.

7 errores de diseño web que pueden destruir tu SEO

1. No utilizar (o no usar correctamente) las etiquetas H1, H2, H3, H4, H5 y H6

Cada página de nuestro sitio web tiene que tener una correcta estructura de encabezados y párrafos.

Los encabezados sirven para indicar a los motores de búsqueda las palabras clave principales de nuestra página.

Google examina los títulos y determina su relevancia en función de si son H1 (más importante), H2, H3, H4, H5 o H6 (menos importante).

Sin una buena estructura, estamos perdiendo la oportunidad de posicionar mejor en los buscadores por los términos que más nos interesan. 

Lo ideal es que en cada página solo utilicemos un H1 (para el título, con las palabras clave principales) y no más de cuatro o cinco H2 (subtítulos, de nuevo con un buen uso de palabras clave).

Así no volveremos loco a Google y nos lo agradecerá.

2. Archivos multimedia muy pesados

Como ya veíamos en este otro artículo del blog, utilizar archivos multimedia en nuestra página web es un acierto, ya que al usuario le encantan y además ayudan a optimizar el contenido en los motores de búsqueda.

Así que definitivamente SÍ a incluir archivos multimedia en nuestro sitio web, pero teniendo mucho cuidado con su tamaño.

Subir imágenes o vídeos demasiado pesados a nuestra web puede afectar negativamente a la velocidad del sitio, lo que se traducirá en una mayor tasa de rebote y en una clasificación más baja en los motores de búsqueda.

Me vais a perdonar el chascarrillo, pero tengo que decirlo. En este caso, amigos, el tamaño importa y mucho.

Si tienes este problema y quieres resolverlo, es muy sencillo.

Solo tienes que insertar la URL de tu sitio web en alguna página de análisis de velocidad como por ejemplo GT Metrix o Google PageSpeed y podrás ver qué imágenes pesan demasiado y están afectando a la velocidad de carga de tu web.

Una vez localizadas, puedes reducir su tamaño de varias formas: con Photoshop, con algún programa de reducción de archivos como Fileminimizer, con la web I love IMG o con plugins específicos para ello como Smush o WP Rocket (yo personalmente prefiero este último ya que incluye otras opciones la mar de interesantes como optimización de la base de datos, limpieza de revisiones de entradas, cache y otras muchas opciones para que tu página web vaya como un cohete).

3. Una web insegura

Cuando un usuario entra en una web sin protocolo de seguridad (http:// en lugar de https:// delante de la dirección) el propio navegador se encarga de advertirle de que el sitio al que intenta acceder no es seguro.

En Google Chrome aparece el mensaje “No es seguro. La conexión con este sitio web no es segura”.

En Mozilla Firefox aparece un icono de candado tachado en rojo y el mensaje “Conexión no segura”.

En Microsoft Edge (antiguo Internet Explorer) directamente te dicen “Ten cuidado aquí”, seguido del mensaje “La conexión con este sitio web no está cifrada”.

Estos mensajes no incitan precisamente a seguir navegando por una web que no nos ofrece ninguna garantía de seguridad.

Resultado: lo más probable es que el usuario desconfíe y abandone tu página.

Como ves, no proteger tu sitio web con un certificado SSL supone una señal de bandera roja como una casa para el SEO y los visitantes de tu web.

La buena noticia es que la mayoría de empresas de hosting ofrecen el certificado SSL de forma gratuita, así que no hay excusa para no proteger tu sitio web.

4. No utilizar llamadas a la acción (CTA)

Una página web siempre debe tener un objetivo, ya sea que el usuario llame por teléfono, rellene un formulario o realice una compra.

La única forma de conseguir que los usuarios realicen la acción que queremos es utilizar llamadas a la acción o CTA (call to action) en nuestro sitio web.

Si no utilizamos llamadas a la acción claras y definidas estaremos perdiendo conversiones.

Para saber si nuestro sitio web está bien optimizado para la conversión, lo ideal es añadir llamadas a la acción y analizar la tasa de conversión.

¿Cómo podemos hacer esto? Muy sencillo. Configurando objetivos en nuestra cuenta de Google Analytics (Conversiones – Objetivos – Configurar objetivos).

Además, si diseñamos nuestra web con Divi podemos usar Divi Leads, un sistema de pruebas multivariable que nos permite crear varias versiones de una misma sección, fila o módulo y comprobar cuál funciona mejor y genera más conversiones.

¡Por este tipo de cosas y muchas más estoy in love con Divi!

5. Utilizar pop-up

Lo has vivido cientos de veces: estás tranquilamente navegando por un sitio web, por fin encuentras lo que estabas buscando y ¡zas! un pop-up en toda la cara tapándote toda la pantalla.

Sí, definitivamente ha conseguido llamar tu atención. ¿Pero para bien?

Como hay de todo en este mundo seguramente habrá gente que leerá lo que pone en el pop-up, se acabe interesando y hasta realice la acción deseada (normalmente dejar tu e-mail).

Pero no nos engañemos, la mayoría de nosotros se pondrá a refunfuñar cual Pitufo Gruñón, lo cerrará y se irá a otra cosa mariposa.

Yo por lo menos soy de estas últimas.

Por eso estoy totalmente en contra de los pop-up y nunca los recomiendo ni los recomendaré a ningún cliente.

Y no soy la única. El mismísimo Google ya ha advertido a las empresas que eviten utilizar demasiados pop-up en sus sitios web, principalmente porque son más destructivos que constructivos y porque comprometen la experiencia de usuario, sobre todo en móviles.

Así que, si tienes algún pop-up en tu web y quieres mejorar tu posicionamiento en los buscadores, quizás ha llegado el momento decirle adiós y enviarlo al infierno de los pop-up.

6. Diseño no responsive

Hasta hace poco yo pensaba que lo del diseño responsive es ya una obviedad y que prácticamente todas las empresas han adaptado sus sitios web para que se vean igual de bien en escritorio, tablet y móvil.

Pues resulta que no.

Te sorprendería saber la cantidad de páginas web que he visto en los últimos meses que no son responsive.

¡Craso error!

Como ya comentaba en este otro artículo del blog, en julio de 2019 Google cambió su forma de indexar los sitios web, teniendo en cuenta su versión móvil primero y su versión de escritorio en segundo lugar.

Por tanto, las nuevas páginas web que no estén adaptadas a todos los dispositivos no existirán para Google.

¿Y por qué ha hecho esto Google? Es de cajón. Hoy en día la mayoría de los usuarios acceden a internet a través de sus teléfonos móviles y para Google el usuario es Dios.

Así que las páginas web que no ofrezcan una buena experiencia de usuario en móviles, lo tienen bastante crudo para posicionar bien en los buscadores.

Ya sabes, si no quieres ser invisible para Google, más te vale contar con una web responsive.

7. Contenido de baja calidad

A Google le encanta el contenido. Como siempre digo, no se trata de escribir el Quijote en tu página web, pero sí de aportar información suficiente y de calidad que te ayude a conectar con los visitantes de tu sitio.

Sin contenido no hay palabras clave y sin palabras clave no hay posicionamiento.

Lo recomendable es que incluyas al menos 300 palabras por página en tu web. Si son más y utilizas las palabras clave con cabeza, mejor.

Y si además combinas los textos con imágenes y vídeos (con sus correspondientes textos alternativos), muchísimo mejor.

De esta manera estructuras el contenido, lo haces más ameno y animas a tus visitantes a interactuar con tu sitio web.

Además, algunos estudios han revelado que añadir vídeos en una web ayuda significativamente a reducir la tasa de rebote.

¡Que viva el contenido multimedia!

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